domingo, 21 de diciembre de 2008

Navidad

Acostumbrado a una anual publicación de historias navideñas, mientras estaba sentado frente a la computadora y pensando en algo interesante de contar mientras quemo el tiempo que demora bajar el especial de noches de climax que da en el 73 de cable... se me vino a la cabeza recordar las navidades pasadas y su evolución en mi vida.

Las navidades siempre han sido épocas buenas para mi, de niño con o sin regalos, nunca tuve mucho que ostentar en relación a ellos pero siempre fueron buenos. Es curioso como cambia la necesidad cada año que pasa, teniendo en cuenta que de niño uno desea los mejores juguetes de la temporada gracias a la publicidad exagerada, no puedo quejar obtuve el carrito rojo que programas con unos botoncitos para que haga todas las monadas que imaginaba en el momento, después al llegar a mi adolescencia ya no era juguetes lo que quería esta vez tecnología: un celular nuevo, una TV nueva, un DVD, un mp3... ahora que casi saboreo la adultes los gustos cambian y prefiero dinero y ropa. Que pasara cuando por azares del destino bordee los 34 años y sea navidad?? seguramente no precisare de regalos si no de regalar.

Este año me vi curiosamente inundado de publicidad navideña y de mensajes que a mi parecer no tienen mucho que ver con la fecha. Y es que tengo q confesar: DETESTO LAS PELICULAS NAVIDEÑAS!!!, me llegan! las repudio, las alejo y si fuera de mi, bombardeo los estudios donde estas se producen. Y ocurre que en la mayoría de estas el mensaje es una reverenda cojudez! (perdón por el término). En mi punto de vista las películas hechas por los gringos en navidad son pésimas, sin el mensaje correcto. Por favor! donde en el mundo existe el pueblo Navidad, donde un grinch verde intenta destruirlo; dicho sea de paso este pueblito apestoso exageradamente decorado con verde, tojo y dorado no se encuentra ni un solo nacimiento, o una imagen relacionada con la Sagrada Familia, o algo parecido, al contrario: Papa Noel, Santa o como quieran llamar al gordo ese, es considerado un dios que visita este pueblito una vez al año.

Otra malísima película es: ELF el duende, que por cierto es a mi parecer la película más gay de navidad que he visto!, seguida de que nuevamente el motivo es Papa Noel, su pueblo, los duendes de los juguetes y toda esa porquería que no existe! (si mi hermana lee esto, es mejor que se entere). Una más para agregar a mi lista es: Santa Clausula, que nuevamente muestra a un Papa Noel divinizado, repartiendo el espíritu de navidad (que por cierto no sé a cual se refieren los gringos).

Es que parece que cada año que pasa, Jesús le tiene que hacer la competencia a Papa Noel, quien entrega más regalos quien da más mensajes y definitivamente quien vende más. No hay grifo que no tenga adornos de luces con este gordo personaje, no hay película que no lo traiga, es más! no hay publicidad que no traiga la risa alcohólica, lasciva y casi perversa de este señor.

Este año no puse un gordo rojo en mi ventana, mucho menos me compraré el gorrito característico, pobres reyes magos! se olvidaron de ellos, los huevearon y los mandaron de regreso a su tierra!.

En realidad el mensaje se fue terjiversando, sí, quizás se trate de perdonar, de iniciar las cosas, de ser sincero y amar... pero eso no esta en base a las enseñanzas de Papa Noel! no, si de algo sirvió que se inventen que el 25 de Diciembre nació Jesús, pues que eso se recuerde! No pretendo lanzar un mensaje de catolicismo o cristianismo, ya que me considero quizás el peor practicante de las filas de esta fe (fumo, miro pornografía, soy muy soberbio a veces, no hago deporte, no me gustan los mendigos y muy rara vez comparto lo mio), pero eso si... no me gustaría que siendo mi cumpleaños, mi familia adorne mi casa con fotografías de un compañero de colegio al cual conozco casi nada y vean sus videos de niño.

martes, 9 de diciembre de 2008

Con tu autorizacion

No se habían hablado en mucho tiempo, es más después de casi dos años se habían vuelto a ver. Alejandro y Pedro eran dos buenos amigos que una noche se encontraron y se pusieron a tomar, no, no como alcohólicos... tomaron un whisky con hielo, y guaraná... ah! Pedro pidió Red Bull, hace tiempo que le gustaba tomar así.

Ambos conversaron, y comentaron sobre lo que les había pasado en casi 2 años de distancia - es mucho para una ciudad tan pequeña - pensaba Alejandro, y si, era cierto. Pero la distancia había sido causada por el estrés del trabajo, ambos se habían matado haciendo milagros con la ley universitaria. Ambos eran abogados.

Al sentarse en la mesa, los dos se quejaban de lo que les había pasado, cuentas mal hechas, malas compañías, alumnos pendejos, y profesores viejos afanadores de las más tiernas carnes universitarias de 21 años. Y esto que! tanto tiempo he trabajado para esta universidad y finalmente me cancelan el contrato en Septiembre! - dijo quejumbroso Alejandro - estamos igual, Septiembre vino con sus olores a primavera, su cielo gris y se llevo mi trabajo.

Además de eso, me engañaron con unas cuentas que salieron mal, se llevaron mis hojas y el sueldo que recibía nunca fue el justo! me mataba trabajando más de 8 horas para que todo salga bien y ahora me botan del trabajo - replicaba Pedro que levantaba su vaso con whisky mientras que pensaba en su interior la facilidad que tienen estas instituciones para invertir el esfuerzo realizado. He perdido mi dignidad, mi dinero, mi tiempo, mi paciencia y ahora me da miedo presentarme a un nuevo trabajo - dijeron ambos.

Un silencio prolongado domino la mesa, solo se oía la música del maestro Chifa que tocaba en su piano aquel tango con el cual festejó el día en que ingresó a trabajar a la universidad. De pronto la pregunta se hizo obvia. Qué no hemos perdido?.

Las ganas de trabajar, de salir adelante, no hemos perdido la amistad - llovían las ideas.

Al terminar el whisky y un poco mareados por el humo del cigarro ambos llegaron a la conclusión: una visita a María Santa, no nos caerá mal.